viernes, diciembre 10, 2004

Mi luna propia

Imposible de describir.
Largas melenas caen onduladas sobre hombros ligeros y poderosos. El pelo castaño tiene brillos de centeno a punto de estar curado pero aun húmedo. La cara, de piel dorada o quizás cobriza, limpia como un mar tropical. Las cejas se tienen que arquear para dejar sitio a dos ojos tan atrayentes como una sima blanca donde brilla el sol negro. Separados por su nariz insultante de personalidad dos pómulos escondidos que aparecen radiantes al sonrojo y amables a la sonrisa. ¿Y su boca? ¿Qué decir de su boca? ¿Con qué comparar su boca? ¿Qué flor lo merece? ¿Qué labios merecen ser llamados labios si no son los suyos? Sólo se me ocurre la palabra “Milagro”.
Porque “imposible” se queda pequeña ante ella..

Jsin2003

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